martes, 11 de enero de 2011

El lunes que si quise

Es lunes, creo que nadie le gusta este día, me incluyo. Son las 6.30 de la mañana, el despertador suena, me tengo que levantar para ir a la pega. Parece ser un lunes cualquiera, nada hace parecer que será uno distinto, nada.
La mañana avanza, ya es pasado mediodía, es hora de colación. Voy en busca de ella, reviso mi celular y encuentro llamadas perdidas de mi viejo y un teléfono desconocido. Llamo a mi viejo y me de la fantástica noticia de que me han llamado a la casa, desde mi universidad informando que me había ganado una beca, para hacer una pasantia en la USACH.
La noticia llegó cuando ya había perdido la esperanza de haberme ganado la beca a la cual postulé, los resultados llegaron 1 mes después de lo presupuestado.
Quizás para muchos es algo sin importancia, pero para mi fue una alegría inmensa, hace tiempo que no me sentía tan feliz, por eso lo escribo y lo comparto contigo que estás leyendo esto.
En ese momento, estando en el trabajo quería puro contarle a alguien, amigos/as, familiares etcétera, abrazar a alguien y decirle "estoy más feliz que la chucha" pero tuve que contenerme las ganas, hasta llegar a casa y abrazar a mis viejos, y decirles, lo logré, lo logramos, porque gracias a que se sacan la cresta porque nada me falte, también es logro de ellos.
Creo que hacer las cosas bien, rinde sus frutos.

P.D Recuerdo que alguien alguna vez me dijo que yo sembraba mal, y que cosecharía puros fracasos en mi vida, y bueno aquí estoy, poseedor de una beca.

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